Inés vive en el bajo de una casa gris 
y es dependienta en un gran almacen, 
no tiene a nadie en especial 
a quien querer, con quien estar 
y cuando mira alrededor 
todo parece que está mal. 
Inés, tiene una sola forma de escapar 
que es ir al cine, sentarse y soñar 
con la ilusión de par en par 
y una sonrisa de emoción 
prepara el corazón 
para reir, para llorar, 
Inés nunca olvida 
que el cine le cura 
todas las heridas, 
que aquí no hay engaño 
y la gran mentira 
todos estos años 
ha sido su vida 
que está a la salida 
para hacerle daño. 
Inés, desde el momento en que apagan la luz 
le dice al mundo que la deje en paz, 
se ha convertido en la mejor, 
es la más bella del lugar. 
Buenos y malos por igual.. la adoraron.