Escribo tu nombre sin el mío 
Hoy en tu adiós y desvarío
Inevitable debe ser 
Preguntaré por eso
Si al perderte aprenderé
A renunciar a ti
Mas si te miro siento que
Te asusta tanto como a mí 
Pudo haber sido y no lo fue
Pudo mas no lo fue
Y mi recuerdo al navegar
A través del alma va
De repente vuelvo a estar allá, ahora

Tú eras el cielo y yo la tierra
Y cada uno una mitad
En cada duda, en cada realidad
Tú eras la sangre y yo las venas
La misma luz en el cuerpo, en el alma

Sin respirar te buscaré
Sin respirar, ahogandome
No hay un culpable, ya lo ves
Ni un inocente sólo
Ahora un instante más 
Y dos latidos se unirán
Con la impresión de que de nuevo sea
Igual como antes

Tú eras el cielo y yo la tierra
Y cada uno una mitad
En cada duda, en cada realidad, en la mirada
Tú eras la sangre y yo las venas
La misma luz en el cuerpo, en el alma

Así mientras yo te veo todavía
Y te vas, mi vida
No consigo no sentirte mía
Y estar sin ti yo no sé
Yo no podré ovidarte
Cada palabra que me decías
Cada proyecto de libertad
Por qué ya no pueda ahora ser ayer

Y estar sin ti no sé
Y estar sin ti no sé